Disney Animation Studios está viviendo lo que muchos llaman su segundo renacimiento; el primero tuvo lugar en los 90 con grandes clásicos como “La Bella y la Bestia”, “Aladdin” o la injustamente olvidada “El Jorobado de Notre Damme”. Tras el relativo, e inmerecido, fracaso de la notable “Tiana y el Sapo” en 2009, el estudio, tristemente, llegó a la conclusión de que debía centrarse en el cine generado por ordenador y olvidarse por completo de la animación tradicional.
Desde entonces, Disney ha estrenado con gran éxito comercial “Enredados”, “Rompe Ralph, Rompe”, “Frozen” y “Big Hero 6”. De este grupo, en el que no hay ninguna mala película, la mejor fue “Frozen”, que renovó la fórmula de la princesa Disney, hasta la llegada de “Zootrópolis”, que es, desde ya, la peli a batir en el Óscar a la mejor película de animación.
“Zootrópolis” es un thriller policiaco, género que Disney no tocaba desde 1986 con la genial “Basil, el Ratón Súperdetective”, cuya trama gira en torno a unas desapariciones que asolan “Zootropolis”, una gran urbe en la que todas las especies animales conivien en, aparente, armonía. Los encargados de resolver el misterio son una conejita policía, la primera de su especie en el cuerpo, y un zorro estafador.
La peli es una metáfora de problemas tan graves en nuestra sociedad como el racismo y las drogas y tiene la típica moraleja Disney de “si te esfuerzas lo suficiente, puedes conseguir todo lo que te propongas”.Por lo tanto, “Zootrópolis”aspira muy alto en su parte moral y lo hace con un enorme éxito gracias a unos personajes muy bien definidos con los que el público se divertirá y se identificará; la conejita y el zorro protagonistas tienen una gran química digna de las mejores películas de policías compañeros de los 90, el jefe de policía, siempre enfadado, es también muy divertido y todos los demás secundarios tienen algo que les define y les hace intresantes.
Lo que más me gustó y me sorprendió de “Zootrópolis” es que la trama policiaca es verdaderamente interesante; en ningún momento sentí ser un adulto viendo una película infantil. Estaba intrigado y quería saber cómo acabaría la historia, que no es nada previsible.
Si a todo esto añadimos una animación excepcional, unas escenas de acción emocionantes, un humor que siempre funciona y referencias a “El Padrino” y “Braking Bad” entre otros, tenemos una gran película que es perfecta para niños y adultos; incluso puede que sea aún mejor para los adultos.
Así que id a ver “Zootrópolis”, y si os da vergüenza ir solos a ver una peli de dibujos de Disney, llevad a vuestro primo, sobrino o lo que sea. Os encantará a los dos.
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