“EXPEDIENTE WARREN 2”: SUSTOS Y TENSIÓN A LA JAMES WAN

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“Expediente Warren” es una de mis películas de terror favoritas y una de las mejores que nos ha dado el género en los últimos años. Pocas pelis han conseguido crear tanta tensión plano a plano, escena a escena y con muchos sustos de esos que te hacen dar un salto en tu butaca. Lo que en principio era una historia que podría definirse como una actualización de “Poltergeist” con unas gotitas de “El Exorcista”, dio la gran sorpresa gracias a la excelente dirección de James Wan, nuevo maestro del terror, firmante de títulos como la primera de “Saw” e “Insidious”.

El gran éxito de “Expediente Warren” originó el flojete spin off “Anabelle”, que sólo disfrutarán los incondicionales del género con bajas expectativas, pero también fue un éxito, por lo que una continuación directa del film original era casi inevitable. Pero si algo suele caracterizar a las películas de miedo es que sus secuelas suelen ser horrorosas. Basta con ver los bodrietes que siguieron a obras cumbres del género como “El Exorcista” o “Pesadilla en Elm Street”. Afortunadamente, para esta segunda parte, ha vuelto James Wan, que ya demostró que es capaz de hacer una buena secuela con “Insidious 2”.

“Expediente Warren: el Caso Enfield” cuenta la historia, supuestamente real, de una familia inglesa que, en los años 70, tuvo que vérselas con un espíritu maligno que rondaba su casa y recibe la ayuda de los Warren, un matrimonio experto en luchar contra los peores entes del más allá. Como vemos, la historia es prácticamente la misma que en la primera parte, pero Wan es capaz de darle un enfoque bastante distinto a la historia consiguiendo que la peli no sea una simple copia de la original.

Ya desde el principio empiezan las escenas de cosas raras ocurriendo en la casa por la noche y están tan bien rodadas y crean tal tensión que uno se mete en la peli, y se va acurrucando en su butaca desde el principio. Estas escenas, de las que destaco la de “el cuadro” -¡vaya susto!-, se suceden a lo largo de toda la película. Puede que para alguno sea repetitivo, pero asumo que, si decides ver esta película, es lo que buscas y está tan bien hecho que en ningún momento se hace pesado.

Aquí los Warren tienen más protagonismo que en la primera parte, lo que es de agradecer, ya que además de las buenas interpretaciones de Patrick Wilson y Vera Farmiga, son dos personajes bien construidos, interesantes y que caen estupendamente bien.

Como parte negativa, hay que señalar algún efecto especial por ordenador; la primera parte no tenía ninguno, que desentona con la atmósfera de la peli y canta muchísimo y el final es demasiado precipitado y bastante flojo.

“Expediente Warren: El Caso Enfield” no es tan buena como su predecesora, y la verdad es que era muy difícil que lo fuera, sobre todo teniendo en cuenta que ya ha desaparecido el factor sorpresa, pero es una buena peli de terror y una excelente secuela si se le compara con el resto de continuaciones que hay por ahí. Si te gusta este tipo de cine, disfrutarás reuniéndote de nuevo con los Warren y te darás un buen par de sustos… ¿qué más se puede pedir? Pues que si hay una tercera parte, que seguro la habrá, que la dirija James Wan.